El deseo de logar la mejor apariencia física posible ha ido cobrando cada vez más importancia en los últimos tiempos, magnificado por el efecto multiplicador de las redes sociales. Gozar de un buen aspecto, de una imagen juvenil, estar en forma,… Todas ellas son características cada vez más apreciadas por la sociedad del siglo XXI. Hoy, más que nunca, se han convertido en elementos asociados al éxito, tanto en la vida personal como en la profesional.

En estas circunstancias, es comprensible el fuerte crecimiento que han experimentado en nuestro país las distintas tipologías de centros que ofrecen servicios relacionados con la belleza: centros estéticos, gabinetes de tatuajes, peluquerías, centros de depilación, establecimientos para el bronceado,… Toda una industria floreciente que, sin embargo, tiene también sus riesgos. Se trata de actividades que, en mayor o menor medida, pueden afectar a la salud de los usuarios. La normativa ha ido incrementando los requisitos en cuanto a medidas de prevención higiénico-sanitarias para este tipo de establecimientos, pero no es posible erradicar el riesgo por completo, de ahí que sea conveniente contar con una cobertura de seguros bien adaptada a las necesidades de esta actividad, para mayor tranquilidad de la empresa y de sus clientes.

Un riesgo creciente

La oferta de seguros de Responsabilidad Civil Sanitaria cuenta con un producto específico para centros de estética y belleza. Las razones que han llevado a la aseguradora a desarrollar este producto dirigido a este tipo de centros se encuentran en el creciente número de servicios que ofrecen a sus clientes. Una tendencia que va acompañada, además, de una mayor sofisticación de dichos servicios, con la utilización de productos y equipos tecnológicos que podrían causar daños graves a los clientes. Estas características, unidas al hecho de que se trata de actividades destinadas a la atención y el tratamiento de personas, incrementan de forma notable su exposición al riesgo.

En una sociedad donde los clientes son cada vez más exigentes y aumenta la tendencia de los consumidores a presentar reclamaciones en defensa de sus derechos e intereses, la probabilidad de que los establecimientos de estética y belleza reciban reclamaciones por daños y perjuicios es también creciente, lo cual puede tener importantes repercusiones sobre el patrimonio de la empresa y de sus administradores. La naturaleza de los riesgos a los que se exponen, ligados a la salud de las personas, puede dar lugar a cuantiosas indemnizaciones frente a las que es importante protegerse.

De hecho, ya se han registrado hechos que pueden ilustrar la tipología de las incidencias que dan lugar a reclamaciones por daños y perjuicios, así como sus consecuencias. Un ejemplo es la aplicación de un tratamiento basado en un producto estético en mal estado que pueda provocar daños en la piel o en cualquier otra parte del cuerpo del paciente.

Ante riesgos de este tipo, el seguro de Responsabilidad Civil Sanitaria para Centros Estéticos y de Belleza suele incluir las coberturas de Defensa Jurídica y Fianzas; la Responsabilidad Civil Profesional, de Productos, de Explotación, Locativa, Patronal, de Contaminación Accidental y de Incumplimiento del Reglamento de Protección de Datos; Daños a bienes de pacientes en custodia, Inhabilitación profesional; Recuperación de archivos digitales, e instalaciones radioactivas.

Este seguro está dirigido a establecimientos dedicados a actividades muy diversas, como pueden ser peluquería, manicura y pedicura, maquillaje, bronceado, esteticistas, tatuajes y anillado, depilación, eliminación de varices y tratamientos con ácido hialurónico o similares, entre otros.