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Diferencias entre alquiler de temporada y alquiler vacacional
Alquiler de Temporada vs. Alquiler Vacacional: Diferencias y Usos Principales
Aunque ambos tipos de alquiler comparten algunas similitudes, no son iguales ni tienen los mismos propósitos. A continuación, te presentamos las particularidades de cada modalidad para entender mejor su uso.
Alquiler de temporada: características principales
El alquiler de temporada es un contrato sin intención de permanencia en la vivienda. Según el abogado de ARAG, José María Guamis, este tipo de acuerdo puede ser útil en situaciones como:
- Estancias temporales en una ciudad por razones laborales.
- Periodos de estudio.
- Tratamientos médicos prolongados.
- Obras o reformas en la residencia habitual del inquilino.
Aspectos claves del alquiler de temporada:
- No cubre una necesidad de vivienda permanente: Las condiciones y cláusulas del contrato son acordadas libremente por ambas partes.
- Sin limitaciones en el alquiler: No se aplica ningún tope al precio del alquiler.
- Duración variable: Puede extenderse desde una semana hasta varios meses. Sin embargo, se recomienda que no supere los 11 meses para evitar conflictos legales que puedan hacer aplicable la normativa de vivienda habitual.
- No se renueva automáticamente: A menos que ambas partes lo acuerden, no existen prórrogas.
- Servicios adicionales no incluidos: No incluye limpieza, lavandería u otros servicios personalizados.
- Obligaciones de las partes:
- El propietario está obligado a respetar lo pactado y solo puede resolver el contrato si el inquilino incumple las condiciones.
- El inquilino debe respetar la duración estipulada en el contrato, de lo contrario, podría estar sujeto a reclamaciones por daños y perjuicios.
- Fianza obligatoria: Es necesario entregar una garantía equivalente a dos meses de alquiler.
Alquiler vacacional o turístico: características principales
Este tipo de contrato está regulado por normativas relacionadas con la actividad turística. Es importante destacar que en España no existe una legislación única aplicable a nivel nacional, ya que la regulación depende de cada Comunidad Autónoma y, en algunos casos, de los ayuntamientos.
Aspectos claves del alquiler vacacional:
- Cumplimiento normativo: Las regulaciones pueden incluir la necesidad de tramitar una licencia turística, así como cumplir con requisitos específicos del inmueble, como estar completamente amueblado, contar con equipamiento adecuado, disponer de un botiquín y hojas de reclamaciones.
- Estancias más breves: Por lo general, las reservas suelen ser de pocos días y rara vez superan el mes de duración, según explica el abogado José María Guamis.
- Servicios adicionales: Si la vivienda está amueblada, se comercializa a través de canales turísticos y ofrece servicios como limpieza, se considera un alquiler turístico.
- Restricciones por parte de la comunidad de propietarios: Según la Ley de Propiedad Horizontal, los vecinos pueden limitar este tipo de alquileres, establecer cuotas especiales de gastos
Conclusión
Aunque ambos tipos de alquiler pueden parecer similares, sus características y usos son diferentes. El alquiler de temporada responde a necesidades temporales específicas, mientras que el alquiler vacacional se centra en estancias más cortas asociadas al turismo. La elección del contrato dependerá del propósito de uso y del cumplimiento de las normativas aplicables.